Área de Educación Religiosa
Justificación
En el marco de la Educación Pública, se hace importante asumir el estudio de la Educación Religiosa como el conocimiento reflexivo de sí mismo para vivir mejor, lo cual conlleva necesariamente a un mejor entender, un mejor comprender y a un mejor obrar, partiendo de unos principios, valores y normas de vida práctica y sociales enmarcadas en una sociedad multicultural, mediante las cuales se garantice un orden colectivo, de convivencia en la diferencia, de tolerancia a las diversidades, de respeto por lo privado e íntimo y de consolidación del espíritu público regido por la ley, lo que constituyen fundamentos para la formación de sujetos sociales y futuros seres humanos capaces de hacer parte de la construcción de una sociedad sustentada en valores éticos, morales y religiosos.
En muchos casos la enseñanza de la Educación Religiosa está orientada a la ampliación de datos, personajes, corrientes, inventario o recetarios de máximas de acción moral, elaborando códigos de prescripciones a la manera de los diez mandamientos, definiendo quién es mejor o peor persona, enmarcándose dentro de fórmulas abstractas que dicen: sea honesto, responsable, solidario, de las cuales se debe dar razón en los exámenes, sin tener en cuenta la idiosincrasia del estudiante, sin pensar en la posibilidad que por cuestiones de principios individuales y familiares esas mismas exigencias no sean acatadas.
El Colegio Germán Arciniegas, IED., busca, a través del desarrollo de este Plan de Estudio, fortalecer la comprensión del valor de la Persona, como ser Individual y Social, en el marco histórico actual, entendido como sujeto civil o ciudadano orientado en su dimensión religiosa, antropológica y social, desde los discursos de la ciencia, la ley y la religión.
En el marco de la educación colombiana, se garantiza la enseñanza de la Educación Religiosa como derecho, en el artículo 24 de la Ley General de la Educación, Ley 115 de 1994, que establece que “…los establecimientos educativos la establecerán sin prejuicio de las garantías constitucionales de libertad de conciencia, libertad de culto y el derecho de los padres de familia de escoger el tipo de educación para sus hijos menores, así como del precepto constitucional según el cual en los establecimientos del Estado ninguna persona podrá ser obligada a recibir educación religiosa”.
Objetivo General
Propiciar un ambiente de reflexión y formación religiosa en los niños, niñas y adolescentes como espacio favorable en la construcción de su dimensión religiosa para desarrollarse plenamente a nivel personal, familiar y social.
Objetivos Específicos por ciclo:
Primero
- Fortalecer la comunicación personal del ser humano con un ser trascendente, a través del contacto con la creación, el mundo y las personas.
Segundo
- Reconocer la existencia de un ser superior en su vida y expresar acciones que lo ayudan a dar testimonio como creyente en su entorno familiar y social.
Tercero
- Conocer que cada expresión religiosa tiene un libro que es su guía espiritual donde manifiesta el querer de su fundador, y las orientaciones que debe aplicar en su vida en relación hacia los demás y el entorno en el cual vive.
Cuarto
- Conocer la organización de las personas, de acuerdo con su expresión de fe, en comunidades para estudiar las enseñanzas y celebrar sus ritos haciendo de estos una celebración de la vida en referencia con el creador.
Quinto
- Interiorizar el misterio de un ser superior en su vida, confrontarlo con la realidad personal y social que le rodea, haciendo del entorno una alabanza al creador.